Cuando se inicia un proyecto de vivienda unifamiliar de obra nueva, una de las primeras preguntas a resolver es: ¿Cuántas plantas tendrá mi casa? ¿Cómo será mi escalera?, o por el contrario ¿quiero una casa de una planta? Muchas de estas cuestiones vendrán condicionadas por las dimensiones de nuestra parcela, o por la normativa urbanística. Pero una vez que tenemos claro que tendremos una vivienda de varias plantas, vamos a repasar los diferentes tipos de escaleras que existen.
Tipos de escaleras interiores según su forma
Escaleras de un tramo
Son aquellas que se trata de un único tramo con escalones continuos y una zona de embarco y desembarco al final. Este tipo de escaleras puede dar mucho juego si se hacen peldaños volados o una escalera abierta a la estancia de circulaciones. El inconveniente es que siempre debe tener una zona de tránsito de la misma longitud de la escalera para poder comunicar varias plantas.
Escalera de ida y vuelta
Escalera con dos tramos y descansillo intermedio, con un cambio de dirección de 180º. Podremos hacerla con los dos tramos iguales, con el mismo número de peldaños, o bien que sea asimétrica para dejar un tramo abierto y otro cerrado para almacenaje, por ejemplo.
Escalera en «L»
Se trata de una escalera con un descansillo intermedio y un cambio de dirección de 90 grados en su recorrido.
Escalera en «U»
Esta escalera está realizada con dos descansillos intermedios y cada uno de ellos cambia la dirección 90º. Se trata de una escalera muy práctica para ocupar poco espacio en la superficie de la vivienda, ya que el pasillo que necesitaremos será el más corto posible.
Escalera con peldaños compensados
Se llama así a cualquiera de las anteriores escaleras, pero que en su descansillo dispone de peldaños. Lo más habitual es encontrarse peldaños compensados a 45º o a 30º. Este tipo de escaleras sólo es admitido en España, en usos residenciales privados, nunca en usos públicos.
Escalera de caracol
Por último, tenemos la escalera de caracol, que puede ser con forma circular o cuadrada, pero se trata de una escalera en la que todos sus peldaños rotan con respecto a un centro. Son escaleras que ocupan poco espacio, pero la relación de ancho y alto de sus peldaños suelen hacerla incómoda e incluso un poco peligrosa.






Medidas de escalera más habituales
Vamos a hacer un repaso de las dimensiones qué debe tener una escalera según la normativa más habitual y cómo realizar el cálculo de una escalera.
Dimensión de peldaños
Los peldaños deben ser de una proporción cómoda para caminar, que no supongan un esfuerzo excesivo ni resulten inseguros por ser demasiado pequeños. Las dimensiones estándar son: 28 cm de huella (donde se pisa) y 17 cm de tabica o contrahuella (altura del peldaño). Las escaleras de uso público deben cumplir la relación de 54 cm ≤ 2C + H ≤ 70 cm, si hacemos el cálculo con las dimensiones que hemos comentado, nos sale un resultado de 62, con lo que cumple la relación indicada: 2×17 cm + 28 = 62 cm.
Número de peldaños
El número de peldaños que debemos tener será el resultado de dividir la altura a salvar, de suelo terminado a suelo terminado, entre 17 cm de altura media. De esa manera nos dará un número, que debemos de hacer entero para tener el resultado del número de peldaños. También debemos tener en cuenta que en uso público no se permite salvar de un sólo tramo una altura mayor que 2,25 y en el resto de usos un máximo de 3,20 m.
Ejemplo de cálculo de escalera
Vamos a poner por ejemplo: una vivienda que tiene dos plantas y la altura libre entre suelo y techo son 2,70 m de altura. Además tenemos que sumar el grosor del forjado y falso techo, si lo hubiera. Tenemos que la altura total a salvar por la escalera son 3,10 m de altura. Por tanto, necesitaremos una escalera de 3,10 m/0,17 cm= 18,23. Hacemos el redondeo y nos sale una escalera de 18 peldaños. Este suele ser el número habitual de peldaños en una vivienda unifamiliar. Haciendo de nuevo la división, tendremos que la altura del peldaño será de 17,2 cm y mantenemos la huella en 28 cm. La escalera cumple la relación recomendada por el código técnico de la edificación. Además, debemos saber que nuestra escalera ocupará un espacio lineal si la hacemos de un sólo tramo de 5,04 m. Ahora vendrá la decisión del diseño de la escalera en planta.
Tipos de escaleras interiores según los materiales empleados
Para definir los materiales que emplearemos en una escalera, lo primero es saber cómo será la estructura de la misma, ya que eso condicionará la estética de la escalera y la posibilidad de materiales de acabado.
Escaleras metálicas
Las escaleras metálicas son aquellas realizadas con estructura de perfiles de acero soldados. Esto permite conseguir diseños más ligeros y diáfanos. Son ideales para potenciar la iluminación natural o de un lucernario en cubierta.
Escaleras de hormigón
Las escaleras de hormigón pueden ser pensadas para revestir posteriormente con otro material, o bien para dejar el hormigón visto desde la realización de la estructura. Las escaleras vistas requieren una complejidad extra en la realización, ya que deben calcularse al milímetro antes de verter el hormigón y que éste fragüe, ya que no habrá posibilidad de corrección posterior.
Escaleras de ladrillo
Otra posibilidad, muy empleada, es realizar la estructura de las zancas de escalera en hormigón o acero y posteriormente trazar los peldaños en ladrillo. De esta manera podremos revestir la escalera en madera o porcelánico, en consonancia con el resto del pavimento empleado en la vivienda.


La isla de cocina se ha convertido en un elemento esencial en el diseño de cocinas modernas, y no es casualidad. Sus ventajas son numerosas: desde ampliar el espacio de trabajo y almacenamiento hasta crear un punto focal estético que invita a la interacción social. Una isla bien diseñada puede…
Materiales para fachadas: la guía definitiva para elegir el revestimiento perfecto La fachada es la carta de presentación de cualquier edificio. No solo define su estética, sino que también juega un papel crucial en su eficiencia energética, durabilidad y mantenimiento. Elegir los materiales…
Cómo debe ser la sala de espera de una clínica dental
La sala de espera perfecta: creando un ambiente de calma y confianza en tu clínica dental La sala de espera de una clínica dental es mucho más que un simple espacio de tránsito. Es la primera impresión que los pacientes se llevan de tu clínica, y puede influir significativamente en su experiencia…