VIVIENDA ADOSADA EN GRIÑÓN
Se recibe el encargo de realizar una vivienda adosada a un lindero por parte de una joven familia.
La parcela, de 350 m2, permite ubicar un garaje en superficie, espacio de porche cubierto y jardín.
La vivienda se distribuye en planta baja y primera, con salón, cocina y comedor integrados en único espacio. Esto permite aprovechar la luz natural y la amplitud de los espacios. El uso de la isla a modo de separación entre el salón y la cocina es un recurso fundamental para integrar ambos ambientes y crear una barrera visual. Cuenta también con cuarto de lavandería, un baño y un dormitorio en planta baja empleado como despacho para teletrabajar.
La escalera de subida a la planta primera se diseña de un único tramo, con una losa quebrada de hormigón armado. La pared donde se ubica, se reviste de piedra caliza blanca escarfilada y se ilumina de forma rasante con tiras led empotradas en suelo y techo, creando un contraste de texturas y materiales.
En planta primera se encuentran los 3 dormitorios y dos baños, uno de ellos dentro de la habitación principal en suite.
Una vivienda moderna, minimalista, cálida y eficiente
La imagen final de la vivienda es moderna gracias a su volumen triangular en voladizo, a la vez que cálida y elegante gracias a la fachada revestida en piedra. La combinación de materiales y texturas consigue un resultado armónico para disfrutar de la vida familiar en una vivienda independiente.
A nivel energético, se ha instalado un sistema altamente eficiente de aerotermia con suelo radiante y refrescante. Se ha aislado convenientemente la envolvente y se han instalado carpinterías exteriores de aluminio con rotura de puente térmico en color gris antracita.
La combinación de materiales y texturas consigue un resultado armónico para disfrutar de la vida familiar en una vivienda adosada.
Cliente: Particular
Año: 2021
Localización: Griñón, Madrid
Colaborador: Óscar Bernedo Antoñanzas
Fotografía: David Ballester
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